La respuesta es, indudablemente, sí. El aprender idiomas desde pequeñitos es básico en un mundo global donde cada vez existen menos barreras y todo parece que está a un clic. Está comprobado que los niños poseen una enorme capacidad para procesar y memorizar nueva información, por lo que el aprendizaje de nuevos idiomas es mucho más fácil para ellos.

Cuanto más pequeños sean los niños, más fácil procesarán el nuevo idioma, haciéndolo parte de su rutina y convirtiéndolo en casi una segunda lengua materna, ya que su cerebro se está desarrollando y por ende será mucho más sencillo incorporar nuevos idiomas en su educación.

Como padres tenemos la responsabilidad de dotar a los niños con todas las herramientas necesarias que los conviertan en personas cualificadas para que en el futuro sean profesionales de alto nivel con conocimiento y dominio de varios idiomas, particularmente del inglés el cual es considerado como el idioma más universal.

Importancia de que los niños aprendan nuevos idiomas

Como adultos podemos observar y comprender las innumerables ventajas que se alcanzan al dominar diferentes idiomas.

Cualquier mamá o papá desea lo mejor para sus hijos y una buena educación, también en lo académico, es el mejor legado que podemos dejar a nuestros hijos, porque ellos son los adultos del mañana y son ellos y ellas quienes tendrán en sus manos un mundo mejor.

El mundo necesita personas educadas, tolerantes, comprensivas, solidarias, respetuosas con sus semejantes y con el medio ambiente, por lo que se hace necesario enfocar los recursos y la voluntad de dotar a los niños con las mejores herramientas y conocimientos que contribuyan al bienestar de la sociedad, siendo una de estos el dominio de múltiples idiomas.

Beneficios de aprender idiomas desde pequeñitos

Son numerosas las ventajas que se alcanzan al aprender idiomas a temprana edad, te contamos algunas de ellas:

1. Mejora de las habilidades cognitivas

Un niño que aprende un nuevo idioma desde pequeño tiene la oportunidad de que sus aptitudes relacionadas al procesamiento de la información mejoren notablemente, como las relacionadas con la memoria, concentración, percepción, creatividad, la atención y pensamiento analógico.

Lo que permite además la mejora en las capacidades para la resolución de problemas, capacidad de adaptación, pensamiento crítico, habilidades multitarea, mayor tolerancia, así como el retraso de enfermedades como el Alzheimer.

Una vez que el niño ha aprendido un segundo idioma, se le facilitará el proceso de aprendizaje para un tercero y más.

2. Mayores y mejores oportunidades laborales

El hecho que nuestro peque domine varios idiomas incrementa sus oportunidades a nivel profesional y personal en el futuro, ya que podrá viajar a distintas partes del mundo con la seguridad y confianza de poder comunicarse asertivamente, ya sea para continuar sus estudios o asumir cargos que requieran destrezas en otros idiomas.

3. Niños más sociables y tolerantes

Poder aprender diferentes idiomas desde pequeños facilita a los niños la integración social, ya que tendrán que interactuar y experimentar entornos y realidades diferentes a las propias, facilitando su comprensión, tolerancia y respeto hacia otras culturas. Esto hace más sencilla la integración a distintos entornos y la convivencia con niños con otras costumbres, sin que lo perciban como extraño, conociendo mucho más del mundo que nos rodea, lo que permite una visión más amplia con mayores probabilidades sin limitaciones geográficas o de nacionalidades.

Por supuesto existen grandes y diversas opciones de altísima calidad, como el colegio británico en Madrid, gracias a las cuales es posible descubrir las enormes ventajas que aportan la educación bilingüe a los pequeños.

4. Mejor lingüística

Al aprender un nuevo idioma desde pequeñitos, los niños tendrán mayor fluidez en su comunicación, ya que su cerebro absorberá el aprendizaje de manera tan natural, por lo que aprenderá a pensar en otro idioma sin necesidad de traducir cada palabra, lo interiorizará casi como su lengua materna.

Además no se sentirá inseguro a la hora de comunicarse en otra lengua, ya que se convertirá para nuestro pequeño en algo absolutamente normal.

5. Mejorará su rendimiento académico

Por último, debido al hecho de aumentar y potenciar sus capacidades cognitivas, de memoria, etc. Gracias al aprendizaje de más de un idioma. El niño mejorará su agilidad mental y capacidad de análisis y resolución de problemas, lo que se traduce en un mejor rendimiento académico, sin que sea de forma forzada.

Se trata de optimizar y estimular de forma positiva sus capacidades, dándole la oportunidad de alcanzar mejores resultados en su rendimiento académico.

En definitiva, hablar varios idiomas desde pequeños, les facilitará desenvolverse en cualquier entorno y les abrirá mundos y horizontes más amplios. Y de paso, a la vez que ellos aprenden de forma natural, los papis podemos aprovechar para dar un repasito a lo que sabemos o, tal vez, descubrir una nueva lengua que nos apasione.

Una forma divertida de acercarles a los idiomas es a través de la lectura. Puedes elegir libros sencillos donde pueda aprender palabras sueltas o, cuando ya son un poco más mayorcitos, libros enteramente en otro idioma. Estoy segura de que pasaréis ratos muy, muy divertidos.